Giulietta
Masina (San Giorgio di Piano, 22 de febrero de 1921 – Roma, 23 de marzo de
1994). Actriz italiana
Giulietta
Masina ha interpretado como ninguna actriz las diferentes situaciones de
maltrato hacia las mujeres: violencia de género en La strada, la situación de las mujeres
prostitutas en Las noches de Cabiria, la infidelidad en la pareja en Giulietta de los Espíritus, el
paso de la vejez en Ginger y Fred…
Se
licenció en Filosofía y Letras por la Universidad de La Sapienza. Durante su
paso por la universidad, cultivó su pasión por la interpretación y en el curso
1941–1942 participó en numerosos espectáculos de danza, música y teatro
universitario en el Stadium Urbis, que luego se convertiría en el Teatro Ateneo
de Roma.
En
1943 entró a formar parte de la Compañía de Teatro Cómico Musical donde
actuaría como bailarina, cantante y actriz en diferentes operetas y obras
cómicas.
En
esas fechas, también comienza a trabajar como actriz de radio, junto a Nella
Maria Bonora y Franco Becci, voces muy populares en la época. Comienza a ser
conocida por el éxito del serial radiofónico Terziglio que contaba las
aventuras de Cico y Pallina, que interpretaba junto al locutor Angelo Zanobini.
Estaba escrito por Federico Fellini, por entonces un versátil joven, redactor
de la revista satírica Marc'Aurelio.
Giulietta
y Federico se casan en 1943, comenzando así una intensa relación afectiva y
artística, que sería una de las más relevantes de la historia del cine
italiano.
Después
del fin de la Segunda Guerra Mundial, retoma el teatro universitario con la
obra Angélica, escrita y dirigida por Leo Ferrero y coprotagonizada por
Marcello Mastroianni.
La
obra Gli innamorati sería su última incursión en el teatro en 1951.
Su
primera incursión en el cine se produjo en 1946 como extra en la película
Camarada (Paisà) de Roberto Rossellini, pero su verdadero primer trabajo fue en
1947 en la película Sin piedad (Senza pietà), dirigida por Alberto Lattuada e
interpretada junto a Carla del Poggio. Este papel, de chica de buen corazón y
aspecto pizpireto, se repetirá en esta primera etapa en películas dirigidas por
Carlo Lizzani, Giuseppe Amato o Renato Castellani.
Pero
es de la mano de Fellini cuando alcanza la popularidad mundial con su mítico
personaje de Gelsomina en la película La strada (1954), junto a Anthony Quinn y
Richard Basehart. La película trata de una joven que trabaja para un artista
ambulante llamado Zampanò (Anthony Quinn). La joven muere, y la madre toma a
Gelsomina (Giulietta Masina), también hija suya, y la vende al artista.
Pese al
carácter violento de Zampanò, la muchacha se siente atraída por el estilo de
vida en la calle (la strada), sobre todo cuando su dueño la incluye como parte
del espectáculo. Aunque varios de los personajes que se encuentra por el camino
le ofrecen que se una a ellos, Gelsomina demostrará su lealtad a Zampanò hasta
los límites.
En
1957, Giulietta Masina interpretó el que es, probablemente, el papel más
relevante de su carrera en Las noches de Cabiria dirigida también por Fellini. Giulietta Masina, es Cabiria
Ceccarelli, prostituta de la zona de Ostia, en Roma.
El
film cuenta la historia de Cabiria, una prostituta que busca el amor pero lo
que en realidad encuentra son desengaños amorosos. Su bondad y una cierta
ingenuidad la convierten en víctima de sucesivos vividores que se aprovechan de
ella, le roban y golpean. A pesar de ello, Cabiria se encuentra con un hombre
que le promete un futuro respetable pero, a ello, le siguen una serie de
episodios humillantes donde se pone a prueba la bondad de Cabiria.
En
1958 trabaja junto a Alberto Sordi en la película Fortunella del director
Eduardo De Filippo.
Fellini
contará también con su esposa en su primer largometraje en color, Giulietta de
los espíritus (1965), una historia de
fuerte carga surrealista sobre la infidelidad en la pareja.
En
1985, volverá a actuar para Fellini en la melancólica historia de Ginger y Fred
donde junto a Marcello Mastroianni interpretarán a una antigua pareja de baile
que imitaban a Fred Astaire y Ginger Rogers, muy populares durante la guerra y
que se reúnen al cabo de muchos años invitados por un grandilocuente show
televisivo, paradigma del consumismo y del sentimentalismo fácil.
Premios:
Entre
los premios más importantes de su trayectoria se puede destacar los cuatro
Lazos de Plata (Nastro d'Argento) del Sindicato de periodistas cinematográficos
italianos, como actriz principal en Las noches de Cabiria (1958) y Ginger y
Fred (1986) y como actriz secundaria en Sin piedad (1948) y Luces de variedades
(Luci del varietà) (1950).
Además
le fue concedido un David de Donatello especial en el 30º aniversario de los
premios en 1986 y fue candidata en dos ocasiones a los Premios BAFTA británicos
como mejor actriz extranjera en 1954 y 1957.
En
los festivales de cine, Giuletta Masina obtuvo el reconocimiento como mejor
actriz por su papel en Las noches de Cabiria en 1957 en Cannes y en San
Sebastián.
Giulietta
Masina trabajó también en radio y televisión. De 1966 a 1969 fue, con gran
éxito, presentadora de un programa radiofónico titulado Cartas a Giuletta
Masina, en el que los radioyentes escribían a la actriz. Estas cartas fueron
posteriormente recopiladas en un libro.
También
trabajó en televisión fundamentalmente en los 70, en dos producciones de gran
éxito: Eleonora (1973) dirigida por Silverio Blasi y Camilla (1976) dirigida por
Sandro Bolchi, adaptación de la novela Un inverno freddissimo de Fausta
Cialente.