Joséphine
Baker (3 de junio de 1906 - 12 de abril de 1975) Bailarina, cantante y actriz
estadounidense, nacionalizada francesa.
Fue
un icono musical y político internacional. Se le dio apodos tales como la
"Venus de bronce", la "Perla negra" y la "Diosa
criolla".
Es
conocida por:
Sus
contribuciones al movimiento por los derechos civiles en Estados Unidos (Coretta Scott King le ofreció el liderazgo no
oficial del movimiento en 1968 tras la muerte de Martin Luther King, pero lo
rechazó La
larga lucha contra la Segregación Racial ...)
Ayudar
a la resistencia francesa durante la Segunda Guerra Mundial,
Y
por recibir el honor militar francés, la Croix de guerre.
Además,
Baker fue la primera mujer afroamericana en protagonizar una importante
película, Zouzou
(1934), en integrar una sala de conciertos en
Estados Unidos, y en convertirse en una animadora de fama mundial.
Mujer
inteligente, Baker fue capaz de utilizar su imagen y manipularla a su antojo,
dando forma a su propio público y definiendo su futuro a su manera.
Se
casó cuando tenía 13 años, pero en 1920 ya se había divorciado y su segundo matrimonio fue con
Willie Baker, un guitarrista de blues, de quien tomaría su apellido artístico.
Ganó
su primer concurso de baile a los 14 años. Después de pasar la prueba en un local
de vodevil,
empezó a trabajar de forma continua en el escenario.
Al
finalizar su primer matrimonio en 1920, Josephine Baker se unió a un trío de
artistas callejeros llamado el “Jones Family Band”, que fue integrado después
de la compañía de gira de Dixie Steppers.
Con
solo 16 años de edad, deja a su segundo marido para probar suerte en Nueva
York. Una vez allí, Josephine llega al Music Hall de Broadway en la calle 63.
Recibe varias opiniones negativas del director, hasta que finalmente este le
ofrece un papel breve.
En
1921 se une al elenco de la comedia musical Shuffle Along, un espectáculo
popular en la sociedad negra.
En
1924, después de dos años de gira, Josephine se une a los Chocolate Dandies.
Más tarde entra en el Plantation Club donde conoce a Caroline Dudley Reagan, quien
quería montar un espectáculo en Paris en el que Josephine fuera la
protagonista, haría de ella una estrella.
En
1925, debutó en París con el espectáculo la Revue Nègre, que incluía una
orquesta de jazz,
dirigida por Claude Hopkins, con la
participación de Sidney Bechet. Su exótica forma de bailar, su
sensualidad desinhibida y su vestimenta mínima -tan solo una faldita hecha con
plátanos de tela- resultaron más atractivas para los europeos que para los
norteamericanos.
Bailó
al ritmo del charlestón – música entonces desconocida en Europa- la
interpretación de un baile bautizado “Danse Sauvage” (danza silvestre).
El
escándalo fue rápidamente remplazado por el entusiasmo en general.
Josephine
se convirtió en la cara de los cubistas que adoraban la forma en que el
entusiasmo de los parisinos para el Jazz y la música negra se despertaba.
Este
espectáculo de la “sauvageonne” ha permitido hacer de Josephine Baker la
pionera que es calificada por algunos como un renacimiento negro basado en una
mezcla de jazz, dadaísmo, arte negro y cubismo
Fue
la vedette
del Folies Bergère y luego abrió su propio club Chez
Joséphine.
En
la segunda mitad de los años 1920 y durante los años 1930 fue además una
destacada modelo fotográfica y pin-up.
En
1927 se estrenó su primera película La Sirène des Tropiques, a la que seguirían
Zouzou y Princesse Tam Tam.
A
comienzos de los años 1930 grabó sus primeros discos, y al año siguiente,
consiguió un gran éxito con la canción J'ai deux amours, compuesta por
Vincent Scotto.
En
1936 regresó a los Estados Unidos para actuar en Ziegfeld
Follies con Bob Hope y Fanny
Brice. Una parte importante de la opinión pública atacó la promiscuidad del
show, y varios hoteles y restaurantes impidieron a la artista su entrada.
Durante
la segunda guerra mundial, Josephine que tenía la nacionalidad francesa, se
unió a la resistencia francesa y, posteriormente, fue subteniente
auxiliar en las Fuerzas Aéreas Francesas, y levantó la moral de las tropas
aliadas, actuando para ellos.
También
colaboró con la Cruz Roja. Después de la guerra recibió la Medalla de la
Resistencia y la Legión de Honor.
Volvió
a casarse con el director de orquesta Jo Bouillon.
Regresó
a la actividad artística y trabajó en el circuito de cabarets de
París durante varios años, luego fue a Cuba, antes de regresar de nuevo a los
Estados Unidos, donde apoyó los movimientos de promoción social afroamericanos.
Luego hizo una gira mundial de despedida, y se retiró del mundo del espectáculo.
Adoptó
a doce huérfanos de diversos orígenes a quienes denominó la tribu del arco
iris.
Regresó
varias veces al escenario por dificultades económicas y también para apoyar el
movimiento norteamericano por los derechos civiles, dio cuatro conciertos en el
Carnegie
Hall, para conseguir fondos para la causa, y participó en la marcha sobre Washington, en 1963.
Tribute to Josephine Baker
https://www.youtube.com/watch?v=g3986lZE0Gc&list=RDg3986lZE0Gc&nohtml5=False#t=0