Soledad
Acosta de Samper (Bogotá, 5 de mayo de 1833 — 17 de marzo de 1913) Novelista,
cuentista, periodista, historiadora y editora colombiana.
Precursora
del feminismo, Soledad Acosta fue uno de los personajes más notables de la
cultura colombiana durante la segunda mitad del siglo XIX. Esta intelectual
bogotana es considerada la primera escritora profesional colombiana y una
pionera en la defensa de los derechos de las mujeres, en pleno Siglo XIX,
aunque su legado quedó en el olvido
Fue
una de las escritoras más prolíficas del siglo XIX en Colombia. Escribió 21
novelas, 48 cuentos, 4 obras de teatro, 43 estudios sociales y literarios, y 21
tratados de historia; fundó y dirigió cinco periódicos, además hizo numerosas
traducciones.
La
vocación hacia lo público, su aptitud pedagógica y su inclinación compiladora
se encuentran presentes en toda su obra.
Soledad
Acosta publicó junto a algunas de sus contemporáneas como las poetas Agripina
Samper Agudelo y Silveria Espinosa de Rendón .
Desarrolló
su obra dentro del romanticismo tardío y anticipó el feminismo en la literatura
de su país
Estudió
en Canadá y en París.
En
1855 regresó a Nueva Granada y se casó con el periodista, escritor y político
J. M. Samper, a quien acompañó en muchas de sus aventuras intelectuales.
Durante 35 años fundó revistas y periódicos (entre ellas la revista quincenal La Mujer, que vio la luz de 1878 a 1881). La Mujer fue una revista redactada por y para mujeres. Es esencial para comprender cómo las mujeres se apropiaron de los discursos patriarcales, republicanos y católicos de la segunda mitad del siglo XIX. En su época, las mujeres eran formadas en los deberes; los derechos quedaban para los hombres. En el prospecto de La Mujer aclara que en esa publicación a las mujeres “no se les hablara sobre sus derechos en la sociedad ni de su pretendida emancipación, sino de sus deberes”. Pero hay que entender estas intenciones en el contexto de la época, porque una de sus grandes preocupaciones fue el lugar social de la mujer en su tiempo. “Siempre me he interesado en estos asuntos, y bien sabido es en Colombia cuánto he trabajado, en la medida de mis escasas fuerzas, para que la mujer obtenga entre nosotros una educación adecuada a su inteligencia y sus aptitudes”, escribió en uno de sus textos. Soledad se preocupaba por lo mal remunerados que eran los oficios desempeñados por las mujeres, siempre por debajo de lo que ganaban los hombres. También promovía la educación para que la mujer fuera independiente económicamente, porque consideraba que el matrimonio no debía ser una obligación, que las mujeres no se tenían que casar por necesidad sino por voluntad. Las instaba a no desconfiar de sus capacidades y que se animaran a estudiar
Durante 35 años fundó revistas y periódicos (entre ellas la revista quincenal La Mujer, que vio la luz de 1878 a 1881). La Mujer fue una revista redactada por y para mujeres. Es esencial para comprender cómo las mujeres se apropiaron de los discursos patriarcales, republicanos y católicos de la segunda mitad del siglo XIX. En su época, las mujeres eran formadas en los deberes; los derechos quedaban para los hombres. En el prospecto de La Mujer aclara que en esa publicación a las mujeres “no se les hablara sobre sus derechos en la sociedad ni de su pretendida emancipación, sino de sus deberes”. Pero hay que entender estas intenciones en el contexto de la época, porque una de sus grandes preocupaciones fue el lugar social de la mujer en su tiempo. “Siempre me he interesado en estos asuntos, y bien sabido es en Colombia cuánto he trabajado, en la medida de mis escasas fuerzas, para que la mujer obtenga entre nosotros una educación adecuada a su inteligencia y sus aptitudes”, escribió en uno de sus textos. Soledad se preocupaba por lo mal remunerados que eran los oficios desempeñados por las mujeres, siempre por debajo de lo que ganaban los hombres. También promovía la educación para que la mujer fuera independiente económicamente, porque consideraba que el matrimonio no debía ser una obligación, que las mujeres no se tenían que casar por necesidad sino por voluntad. Las instaba a no desconfiar de sus capacidades y que se animaran a estudiar
Soledad
Acosta, además, publicó medio centenar de narraciones y una veintena de novelas
y cultivó, además, el cuadro de costumbres y el folletín. El enfoque histórico
y el costumbrismo caracterizan la mayor parte de su producción literaria.
Poseedora
de una cultura cosmopolita (desde 1859 hasta poco antes de morir residió en el
extranjero) se mostró indiferente al modernismo; fue, por contra, una romántica
tardía, poseedora de un lenguaje claro, preciso y real, aunque sin excesivo
pulimento, con intenciones moralizantes.
Obras:
Buena
parte de sus novelas tienen como temática la historia colonial y republicana. Novelas
y cuadros de la vida sur-americana (1869). Incluye: Dolores (Cuadros de la vida
de una mujer); Teresa la Limeña (Páginas de la vida de una peruana); El corazón
de la mujer (Ensayos psicológicos); La Perla del Valle; Ilusión y realidad; Luz
y sombra (Cuadros de la vida de una coqueta); Tipos sociales: La monja - Mi
madrina (Recuerdos de Santafé) y Un crimen: Novelas y cuadros de la vida
sur-americana.Biografías
de hombres ilustres o notables relativas a la época del descubrimiento,
conquista y colonización de la parte de América denominada actualmente EE.UU.
de Colombia (1883).Los piratas en Cartagena: crónicas histórico-novelescas
(1886).Una Holandesa en América. Novela (1888).Viaje a España en 1892. Tomo I
(1893).
La
mujer en la sociedad moderna (1895).Biografía del general Joaquín Acosta:
prócer de la independencia, historiador, geógrafo, hombre científico y
filántropo (1901).Aventuras de un español entre los indios de las Antillas
(1905).Un chistoso de aldea (1905).Españoles en América. Episodios
histórico-novelescos. Un hidalgo conquistador (1907).Catecismo de historia de
Colombia (1908).Biblioteca histórica (1909).Biografía del general Antonio
Nariño (1910).El corazón de la mujer. Luz y sombra. Historias de dos familias. Domingos
de la Familia Cristiana. José Antonio Galán. Episodios de la guerra de los
comuneros (1870).
La
Mujer; lecturas para las familias. Revista quincenal redactada exclusivamente
por señoras y señoritas