Urraca de Zamora (León, 1033-León, 1101) fue una infanta de León; hija primogénita de Fernando I de León y de su esposa, la reina Sancha, heredó la plaza de Zamora tras el reparto realizado por su padre antes de fallecer.
Urraca fue la mayor de los cinco hijos de Fernando I y su esposa Sancha de León, quien nació antes de sus padres accedieran al trono (mayo de 1038)
Recibió educación, al igual que sus hermanos, en la «disciplinas liberales», el trivium y el quadrivium. Urraca se ocupó de la educación de su hermano Alfonso, ocho años menor que ella, por el que sintió un gran afecto maternal, según algunas fuentes
El rey Fernando repartió sus reinos antes de morir entre sus cinco hijos: a Alfonso le otorgó el reino principal, León; a Sancho le concedió Castilla; el pequeño, García, fue nombrado rey de Galicia; Elvira heredó el señorío de la ciudad de Toro, con consideración de reino; y Urraca heredó Zamora.
Fue madrina de armas de Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador, quien fue investido caballero alrededor del año 1060 en la iglesia de Santiago de los Caballeros de Zamora.
Al morir Fernando I de León, su hijo primogénito, Sancho, quedó descontento con las reparticiones hechas y entonces fue declarando la guerra a todos sus hermanos e inició una lucha sangrienta. Su reinado en Castilla fue belicoso y el primer conflicto se dio en la guerra de los Tres Sanchos.
Urraca se mantuvo contraria a la política unificadora de Sancho, por lo que este decidió asediar Zamora para poner fin a la resistencia contra su gobierno.
Pero sus murallas impidieron pasar al monarca, de ahí la denominación de Zamora de «la Bien Cercada».
Tras la muerte de su hermano Sancho, Urraca continuó ejerciendo su señorío sobre la ciudad de Zamora, así como sobre todos los monasterios del reino, honor que compartía con su hermana, la infanta Elvira de Toro. Según la Crónica Silense, fue una de las consejeras más importantes de Alfonso VI, al que siempre protegió y con el que llegó a actuar en la práctica como canciller del reino, tal y como evidencian los primeros diplomas emitidos por Alfonso VI a finales de 1072.
No obstante, su posición se atenuó con el advenimiento de la reina Constanza de Borgoña en 1080
Al final de su vida se retiró a un monasterio leonés, donde permaneció hasta su muerte en 1101, recibiendo sepultura en el Panteón de Reyes de San Isidoro de León, donde yacen sus progenitores, así como dos de sus hermanos, el rey García de Galicia y la infanta Elvira de Toro.
El conocido como cáliz de doña Urraca es una pieza de orfebrería románica del siglo XI que se conserva en el museo de la Basílica de San Isidoro de León. Está formado por dos vasos romanos orientales de ágata-ónice unidos y recubiertos de oro en la copa, el nudo y la peana, dejando al descubierto parte de la copa y casi toda la peana. Para realizarlo, la infanta ofreció sus propias joyas. En la actualidad hay investigadores que lo relacionan con el Santo Grial.
Urraca de Castilla
Urraca de Castilla (1186- Coimbra, 3 de noviembre de 1220). Infanta de Castilla y, desde 1211 hasta su muerte, reina consorte por su matrimonio con Alfonso II de Portugal, era hija del rey Alfonso VIII de Castilla y de su esposa, Leonor de Plantagenet.
Fue madre de los reyes de Portugal Sancho II y Alfonso III.
Lleva el nombre de su tatarabuela Urraca de León y Castilla, quien fue reina gobernante de Castilla y León desde 1109 hasta 1126.
Urraca tuvo nueve hermanos, entre los cuales estaban Berenguela, futura reina de Castilla y Enrique I, para sellar el 22 de mayo de 1200, una alianza entre Juan I de Inglaterra apodado "sin tierra" y Felipe II Augusto de Francia por el Tratado de Le Goulet, el príncipe heredero francés, futuro Luis VIII se casaría con una sobrina de Juan.
La madre de Juan, la abuela de Urraca, Leonor de Aquitania, viajó a Castilla para elegir a la futura reina de Francia entre sus nietas. La elección recayó en la joven Blanca, supuestamente porque el nombre Urraca habría sido indecible para los franceses.
Contrajo matrimonio en 1205 con el infante Alfonso de Portugal, hijo del rey Sancho I de Portugal y de su esposa, la reina Dulce de Aragón y dos años después, en 1208, se celebró el matrimonio.
Después de la defunción de su padre en 1211, el infante heredó el trono y reinó con el nombre de Alfonso II de Portugal.
Urraca patrocinó varias órdenes, incluidas los franciscanos y dominicos.
La reina Urraca falleció el 2 de noviembre de 1220 en la ciudad de Coimbra, en la que había otorgado testamento el 14 de junio de 1214, y fue sepultada junto a su esposo, el rey Alfonso II de Portugal, en el Monasterio de Alcobaça.