viernes, 22 de abril de 2016

Las Mujeres de Cervantes.



Cervantes fue un hombre que se adelantó a su tiempo, y al que su pasión por la libertad llevó a configurar la mayoría de los personajes femeninos de Don Quijote según sus principios de independencia y libertad.

La libertad que otorga Cervantes a las damas en Don Quijote, es tal que las hace salir a los caminos "solas y señeras".

En El Quijote, una de las primeras cuestiones que salta a la vista es la variedad de personajes femeninos que presenta, resaltando que, al igual que entre  los varones, entre las mujeres existen diferencias, hay diversidad. Precisamente por mostrar esta diversidad, Cervantes no cae en los dos tópicos más comunes de la literatura: la mujer santa o madre, que se ajusta a todos los mandatos de la sociedad patriarcal y que es idealizada como estereotipo, frente a la mujer maligna, bruja o prostituta, que por ir en contra de lo deseado por los varones suponen su perdición en un mundo de carne y pecado.





De hecho, Cervantes presenta numerosos tipos de mujeres, tanto con cualidades positivas como con defectos:

El ama y la sobrina, servidoras, sumisas e incultas.

Teresa Panza, conservadora, realista, analfabeta.

Marcela, feminista en su discurso, autónoma con bienes propios, independiente de los hombres y libre (http://mujericolas.blogspot.com.es/2012/04/yo-naci-libre-el-discurso-feminista-de.html)

Dorotea, aventurera, dueña de su vida, actriz estupenda y culta.

Maritornes, desinhibida sexualmente, ruda, inculta.

La Duquesa, mujer noble, culta, aburrida de la vida ordinaria, cruel en sus bromas y juegos.

Dulcinea, que no existe en la realidad y por ello encarna todos los tópicos de la mujer idealizada.

Aldonza Lorenzo, de la que se dice que tiene una gran fuerza física.

Cristianas, moriscas, prostitutas, señoras viajando libremente por los campos de España, etc. Todo un elenco de personajes que humanizan la idea de las mujeres y las igualan a los personajes masculinos que aparecen en la obra con tanta diversidad como ellas.







Consecuencia de esta actitud avanzada es que la mayoría de los personajes femeninos de este libro de libros saben leer y escribir. Sólo son analfabetas Teresa Panza, Sanchica, Aldonza Lorenzo y Maritornes. Sin embargo, las damas de aquellos siglos, en un 90%, no estaban alfabetizadas.

Letradas o analfabetas, señoras o criadas, ricas o pobres, campesinas o aristócratas, las mujeres de Don Quijote son sujetos de pensamientos y actitudes autónomas, viven dignamente en el nivel que les corresponde por su origen, y aunque éste se sitúe en el peldaño más bajo de la escala cultural y social, se muestran seguras de sí mismas y lo viven con gallardía y autoestima.

Cervantes les da vida como sujetos y por tanto no están atadas a ningún convencionalismo social o cultural que se sitúe por debajo de su dignidad como personas. No era así para las mujeres de carne y hueso de aquellos siglos. Y es que con Cervantes la mujer cambia su papel de objeto pasivo a sujeto activo.

¿Dónde en un siglo de analfabetismo, existen unas mujeres, además de libres, con destrezas propias de letradas e instruidas, iguales que los personajes femeninos de Don Quijote? Pues las mujeres de este tiempo, como manifiesta el padre de una dama casadera en la comedia de Calderón No haya burlas con el amor, debían prescindir del terreno intelectual, ya que les estaba prohibido por pertenecer al hombre. Lo suyo era la vida cotidiana ubicada en el espacio privado y atender a sus labores caseras. De esta forma tan sintetizada lo dice el citado padre acerca de su "querida" hija: "Bordar, labrar y coser/ sepa sólo: deje al hombre/ el estudio".(1)







Cervantes y Las Mujeres de la Familia.

Cervantes vivió, desde su infancia, en un entorno familiar marcadamente femenino que hará que, aunque conservador en cuestiones amorosas y familiares, tenga una perspectiva liberadora de la mujer, dignificándola, criticando el menosprecio social de la época hacia ellas, no censurándola como harán otros autores.   


Leonor de Cortinas, madre de Cervantes, que sabía leer, seguramente se preocupaba por la educación de sus hijos; las hermanas de Miguel también sabían leer, cosa muy poco usual en la época, aun en las clases altas. La situación económica de la familia era precaria.

Ella  hizo todo lo posible para gestionar la libertad de Cervantes, cautivo en Argel. Inició los trámites para su rescate y lo llevó a cabo con valentía y tenacidad. Fingiéndose viuda, reunió dinero, obtuvo préstamos y garantías,   y, en septiembre de 1579, entregó al Consejo de las Cruzadas parte del dinero exigido. Los frailes trinitarios encargados de su liberación negociaron, aportaron el resto del fondo general, y  el 19 de septiembre de 1580 fue liberado  por 500 ducados.



Ninguna de las hermanas de Miguel se casó y todas mantuvieron su independencia económica. Dos de ellas llevaron una vida liberal y se convirtieron en amantes de hombres ricos que las mantenían.

Cervantes asumió la forma de vida de sus hermanas con toda la dignidad del mundo y nunca puso ninguna traba al desarrollo de su actividad. Antes bien, contribuyó a ello, entendiendo que era su voluntad y que la voluntad de la mujer, como la del hombre, debe ser respetada.

Andrea y Magdalena son las hermanas liberales. La primera aventura amorosa de Andrea en Sevilla tendrá unas notables consecuencias para la familia Cervantes y será el inicio de una larga vida en la que la relación con los hombres se convierte en un negocio para la subsistencia.  El noble Nicolás de Obando se enamoró de Andrea y le pidió matrimonio. De esta relación nacerá Constanza, pero el compromiso de matrimonio se rompe y Andrea pide una notable compensación económica. En 1568, ya en Madrid, Andrea mantiene relaciones con un rico genovés, Juan Francisco Locadelo, de quien recibirá nuevas dádivas.  En los papeles, su profesión es la de costurera.

Una de las aventuras más largas es la que mantiene, junto con Magdalena, con los hermanos Portocarrero, Alonso y Pedro. Magdalena tiene solo 17 años. Ellas serán las que aporten la mayor parte del dinero que liberará a Miguel y a Francisco de su secuestro en Argel.


Luisa, otra de sus hermanas profesó como monja carmelita en 1565 con el nombre de sor Luisa Belén, en el convento de la Imagen de Alcalá, lo que era habitual en las clases medias y nobles como alternativa al matrimonio en la época.  Allí permanecerá el resto de su vida y allí fue elegida Superiora en 1593 y 1596  y Priora en 1617 y 1620.

Cervantes tuvo una hija, Isabel, con la tabernera  Ana Franca de Rojas. Tras la muerte de esta, Magdalena se encarga de Isabel, que llevará el apellido Saavedra. 





En 1584, Cervantes conoce, en el pueblo manchego de Esquivias, a Catalina de Salazar, de 19 años,  y se casa con ella.  Había sido instruida por su tío y era una mujer culta. Era también sobrina de un hidalgo residente en el pueblo llamado Alonso Quijada Salazar, el que pudo ser el primer boceto para crear el Quijote.

 Miguel pronto abandona Esquivias y el matrimonio vive separado varios años.  Cervantes  da a Catalina un poder para poder realizar operaciones, ya que una mujer no podía vender sin autorización del marido.  «Catalina de Esquivias: memorias de la mujer de Cervantes».


En 1603, el matrimonio Cervantes se instala en Valladolid con toda la familia femenina: Andrea, Magdalena, Constanza, Isabel, y una criada, María de Ceballos, además de dos vecinas de Toledo, una de ellas Juana de Gaitán, viuda del poeta y amigo de Cervantes Pedro Laínez. La corte se había trasladado a Valladolid, y Magdalena y Andrea, que eran costureras, tenían una clientela adinerada que se iba tras el rey Felipe III.

 En 1607 nace la nieta de Cervantes, Isabel Sanz, que morirá a los dos años.    Catalina se encargará, en 1617, de gestionar la impresión de la obra Los trabajos de Persiles y Sigismunda y de la edición de otras obras de Cervantes.

“No admiró Cervantes a los hombres de su familia, pero sí a las mujeres: a su madre, Leonor; a su tía María, a sus hermanas Andrea, Magdalena y Luisa y a su abuela Leonor de Torreblanca. Mujeres levantiscas, decididas, arrolladoras leonas, disparatadas gatas, embrujadoras, atrevidas o insolentes, pero todas inteligentes e insólitas. Mujeres sutiles con talento y finura. Mujeres leídas y “escribidas”, modelos de cervantinas heroínas, tenaces pero nunca tozudas, y con más coraje que todos los varones juntos. Cervantes hizo de ellas arquetipos. “(2)

Fuente:
www.juntadeandalucia.es/averroes/centros-.
(1)Juana Vázquez. Catedrática de Lengua y Literatura y escritora
(2) Fernando Arrabal, Un esclavo llamado Cervantes

Acción y trasgresión femenina en la primera parte del  Quijote .Edward Martín Chauca
https://pendientedemigracion.ucm.es/info/especulo/numero37/traquijo.html (Para ver más a fondo los personajes femeninos)

 Enlaces:
Sobre El Quijote:
Información general de la época y los personajes: http://personajes:http://www.artehistoria.com/



(página dedicada a la ruta seguida por Don Quijote en los diferentes capítulos).
colecciones de grabados, álbumes e iconografía variada de la obra).
http://www.cooltourclub.com/CWQC/Mundo_Quijote/Pintura/Pag_Pinturas.html (página muy completa sobre El Quijote en la pintura).

(filmografía completa de Don Quijote, con fichas de las películas y carteles).
 (página especial de Cervantes virtual para el IV centenario).
materiales.htm (página con diversas webquest del Quijote, para diferentes niveles).
··
Sobre Cervantes:
(biblioteca virtual con gran cantidad de obras literarias para descargar, incluye El Quijote completo, incluso para ser escuchado).
http://cvc.cervantes.es/obref/clasicos/ (otra biblioteca virtual con obras para descargar).
http://cervantes.uah.es/inicio.htm (página muy completa sobre Cervantes, con biografía, obras, obras para descargar, retratos,debates, etc.).