lunes, 26 de diciembre de 2016

Núria Pompeia.Pionera de los primeros cómics feministas de la cultura occidental.



Núria Pompeia (Barcelona, abril, 1931- 26 de diciembre de 2016
Dibujante, humorista gráfica y periodista. Pionera del movimiento de liberación de la mujer en un contexto completamente adverso: los años 70 en España


En 1967 consiguió vender a una editorial francesa Maternasis, su primer cómic y, probablemente, uno de los primeros cómics feministas de la cultura occidental.


En Maternasis, Núria Pompeia ilustra sin necesidad de palabras el proceso del embarazo, un tema completamente tabú en la época, y marca la línea que seguiría en sus posteriores viñetas, visibilizando desde el humor los problemas de las mujeres de forma crítica.




En una entrevista a la revista Triunfo del año 1973 la autora es catalogada dentro de la corriente de la “ironía desesperada” de la literatura catalana, y se señala su “especial predilección por el tema de la mujer que vive, lucha, sufre y muere en el seno de la burguesía”.

Pompeia defiende el enfoque feminista de sus historias, asegurando que “o te rebelas o te resignas. Si te resignas, es posible que dejes de sufrir… pero a mi esto de la resignación me da mucha angustia”.




Siendo prácticamente la única mujer que se dedicaba al humor gráfico durante los primeros años 70, y considerando su polémica y atrevida consciencia política, cuesta creer que llegara a ser redactora jefa de dos revistas (Por favor y Saber), así como directora de programas para TVE. Pero Pompeia, que creaba su obra como una “necesidad de expresar una visión crítica de la realidad”, luchó con sus viñetas imponiéndose ante una sociedad en la que el rol de la mujer se limitaba a la sumisión y el cuidado.



Si en Maternasis mostró la cara menos agradable de la maternidad, unos años después le tocó al matrimonio en Y fueron felices y comieron perdices (1970). “El fin de la mujer es el matrimonio. Y ella se rebela contra el último término de toda una educación, no contra el hecho en sí de casarse”, explica la autora en relación a La educación de Palmira (1972), una serie de viñetas ilustradas por ella misma y escritas por Vázquez Montalbán bajo el pseudónimo de Manolo V el Empecinado, que muestran el adoctrinamiento por parte de la sociedad a una mujer alienada desde que nace hasta el matrimonio, y su lucidez y rebeldía al decir “no” sobre el altar.




La temática se extiende también a Mujercitas (1975), un conjunto satírico en el que Pompeia contrasta los estereotipos tradicionales de la mujer con la realidad de la lucha feminista, criticando los mecanismos que convierten a la mujer en un ser infantil, pasivo, dependiente y conformista.

Núria Pompeia llegó a colaborar con revistas como la propia Triunfo, Vindicación Feminista, Cuadernos para el diálogo, Charlie Hebdo o Brigitte.

Pero la autora no se limitó al humor gráfico y publicó también ficción literaria, como Cinc cèntims (1981), una colección de historias cortas feministas con títulos como El orden y el matrimonio, Ganemos la libertad o La generación perdida. Uno de los temas de la colección, a parte de la visión del matrimonio como despotismo paternalista, es la decepción del movimiento feminista ante el contexto político y la sucesión de regímenes que venden progreso sin un cambio real.



En palabras de Marika, otra de las más relevantes autoras en la historia del cómic feminista, “la huella pionera de Núria Pompeia abrió una importantísima puerta para todas las mujeres, no sólo para las autoras, sino también para las lectoras”.

Y es que la labor de Pompeia fue esencial para el progreso de la mujer y el movimiento feminista, cuestionando estereotipos que parecían estar cada vez más arraigados y visibilizando la (auto)representación femenina que no tenía hasta entonces espacio en el diálogo masculino.


Ha sido Medalla d’Or de la ciutat de Barcelona al mèrit artístic (2000), Creu de Sant Jordi de la Generalitat de Catalunya (2007), y primer Premio de Honor del Colectivo de Autoras de Cómic (2013).