miércoles, 26 de junio de 2013

Margarethe von Trotta. Directora, guionista, y actriz


Margarethe von Trotta (Berlín, 21 de Febrero de 1942). Directora, guionista, y actriz de cine alemana.

Es una de las representantes del Nuevo Cine Alemán junto a Fassbinder, Schlöndorff, Herzog y W.Wenders.

Forma parte del grupo de directoras que también integran Jutta Brückner, Heidi Genée, Jeanine Meerapfel, Ulrike Ottinger, Helma Sanders y Helke Sander, directoras que abordan temas femeninos y relativos a la mujer, en su caso sin la militancia feminista radical de la época.


Ella se decanta por defender el papel femenino en la sociedad con obras, o sea, sus películas. De modo que el suyo es una radiografía social del cine de su época con protagonistas femeninos.

Como ha dicho alguna vez, su punto de vista sobre la mujer es existencial, no ideológico. 




Con 18 años se traslada a París, donde colabora en cortometrajes de tipo experimental.

Estudia Filología germánica y románica.

Comenzó su carrera artística como actriz de teatro, y de ahí pasó a la televisión y al cine, trabajando a las órdenes de reputados directores del Nuevo Cine Alemán, como R. W. Fasbinder, en cuya compañía estrenó en 1970 y 1971 Dios de la peste, El soldado americano y Atención a esa prostituta tan querida.

Otros cineastas a cuyas órdenes trabaja son Gustav Ehmck, Klaus Lemke, Herbert Achternbusch y Reinhard Hauff.

En 1971 tras un primer matrimonio, se casa con Volker Schlöndorff, formando una pareja creativa. 

Más tarde coescribe el guión de La repentina riqueza de los pobres de Kombach (1971).

El doble papel de actriz y guionista lo vuelve a repetir con Schlöndorff en Fuego de paja (1972) y Tiro de gracia (1976).

En 1975 escribieron y dirigieron juntos el guión de  El honor perdido de Katharina Blum, adaptación de la novela de Heinrich Bölls donde ambos comparten créditos no sólo como coguionistas, sino como codirectores.

Como directora en solitario ha dirigido las siguientes obras:

El segundo despertar de Christa Klages (1977), coescrita con Luisa Francia, que sigue a una mujer que atraca un banco para evitar el cierre de una guardería montada por una cooperativa de padres; el contraste con otras dos mujeres, una amiga casada y una empleada de banco, invita a la acción, hay que saber tomar las riendas de la propia existencia para cambiar las cosas y lograr que la vida valga la pena, sin resignaciones estériles.

 



De tono más intimista es Sisters, or the Balance of Happiness (1979), que sigue a dos hermanas, donde la mayor, dominante, anula la personalidad de la pequeña. Algunos han querido ver un simbolismo de la relación entre las dos Alemanias.

Las hermanas alemanas (1981), León de Oro en Venecia.

Locura de mujer (1983), se afianza su imagen de directora de mujeres insertas en dramas psicológicos intensos, aquí a través de la amistad de dos mujeres, una con tendencias suicidas.

Amor y deseos (1988), coproducción con Italia y Francia que adapta a “Tres hermanas” de Anton Chekhov.Sobre las mujeres que ha plasmado en la pantalla, von Trotta afirma: “Siempre me siento atraída por una mujer que tiene que luchar por su propia vida y su propia realidad, que debe superar una cierta situación de encerramiento, liberarse. Éste es quizá el tema principal de todas mis películas”.





Rosa Luxemburgo (1986) marca la primera de las tres películas de corte biográfico.


En 2009 contará en Visión la vida de Hildegard von Bingen, abadesa en la Edad Media, mística, conocedora de la botánica y sus aplicaciones medicinales y autora de obras musicales, que forma parte del santoral católico.




En 2012 el centro de su atención es la filósofa Hanna Arendt en la película homónima, en los años del juicio contra el criminal nazi Adolf Eichmann, para reflexionar sobre la honestidad intelectual, la presión de la opinión pública y las raíces del mal.



En 2015 dirige El mundo abandonado. Una cantante de jazz, recibe una llamada telefónica de su padre, que quiere mostrarle una fotografía que ha visto en la web de un periódico estadounidense. En ella aparece una mujer con un parecido asombroso con su madre, muerta recientemente. El padre le pide que la localice: se trata de una famosa cantante de ópera. Ella acepta a regañadientes para complacer a su padre y emprende un viaje a Nueva York incapaz de imaginar las revelaciones que le aguardan.