Dorothy Vaughn,
Mary Jackson y Katherine Johnson, la historia de tres mujeres matemáticas afroamericanas de la
NASA en la vanguardia del movimiento feminista y de derechos civiles, cuyos
cálculos impulsaron uno de los mayores logros espaciales de Estados Unidos.
Antes de que John
Glenn girara en órbita alrededor de la Tierra, o Neil Armstrong caminara en la
Luna, un grupo de mujeres profesionales en el área de las matemáticas –conocidas
como computadoras humanas– usaron lápices, reglas de cálculo y
máquinas de sumar para escribir las ecuaciones base para el lanzamiento de
cohetes y astronautas al espacio.
Originalmente
relegadas a enseñar matemáticas en escuelas públicas segregadas del sur, fueron
llamadas a servir durante la escasez laboral de la Segunda Guerra Mundial,
cuando la industria aeronáutica de Estados Unidos se encontraba en extrema
necesidad de alguien con conocimientos. Repentinamente, estas profesionales
tenían acceso a un empleo digno de sus habilidades y respondieron a la llamada,
se mudaron a Hampton, Virginia, y al fascinante mundo del Laboratorio
Aeronáutico Langley Memorial.
A pesar de que las
Leyes
Jim Crow de Virginia les obligaba a
estar separadas de sus homólogos blancos, el grupo de mujeres afroamericanas
–computadoras del oeste– ayudó a Estados Unidos a alcanzar una de las metas más
deseadas: una victoria decisiva sobre la Unión Soviética durante la Guerra
Fría, y el dominio completo de los cielos.
Dorothy Vaughan
(1910–2008) Matemática afroamericana que trabajó en la NACA (National
Advisory Committee for Aeronautics), la agencia que precedió a la NASA.
Antes
de trabajar en el Langley Research Center de la NACA en
1943, Vaughan fue profesora de matemáticas en la escuela secundaria Moton High
School en Farmville,
Virginia.
En
1949, Vaughan se hizo cargo de la dirección de la West Area Computers, un
grupo de trabajo compuesto exclusivamente de mujeres afroamericanas,
especialistas en matemáticas. La matemática Katherine
Johnson fue asignada al grupo de Vaughan antes de ser transferida a la
División de Investigación de Vuelo de Langley.
Vaughan
continuó en Langley luego de que la NACA se convirtiera en la NASA,
especializándose durante el resto de su carrera en computación
y en programación en FORTRAN.
Trabajó
en la División de Análisis y Computación del Centro de Investigación de
Langley, y también participó en las pruebas del proyecto SCOUT (Solid
Controlled Orbital Utility Test system) en la instalaciones de la Wallops Flight Facility.
Se
retiró de la NASA en 1971, y murió el 10 de noviembre de 2008.
Mary Jackson
(9 de abril de 1921 - 11 de febrero de 2005) fue una matemática
e ingeniera aeroespacial americana, que
trabajó para el Comité
Aconsejable Nacional para Aeronautics (NACA), el cual más tarde se
transfornaría en el Nacional Aeronautics y Administración Espacial (NASA).
Trabajó
en Centro de Investigación de
Langley la mayor parte de su vida, empezando como calculista en el división de Cálculo de
Área Oeste, y más tarde llegaría a ser la primera ingeniera negra de
la NASA.
Después
de que 34 años en la NASA, Jackson alcanzó el puesto más alto para
ingenieros disponible, y se dio cuenta de que no podía ascender más
sin ser antes supervisor.
Al
llegar a este punto decidió aceptar una degradación para pasar a ser directora
al mismo tiempo de dos programas: Federal Women’s Program en la oficina de
Igualdad de Oportunidades, y del Affirmative Action Program. En
estos cargos trabajó para influir tanto en la contratación como en la promoción
de mujeres en la NASA, en el ámbito de la ciencia, la ingeniería y las
matemáticas.
Durante
su tiempo como ingeniera en NASA,
trabajó en varias divisiones: la División de Investigación de la
Compresibilidad, División de Investigación a Escala Real, División de
Aerodinámica de la Alta Velocidad, y el División de Aerodinámica
Subsónica-Transónica. Es autora o coautora de 12 papers técnicos para
la NACA y NASA.
Trabajó
para ayudar mujeres y otras minorías a ascender en sus carreras,
incluyendo el asesoramiento sobre cómo estudiar para poder cambiar sus
títulos de matemáticas a ingenieras, mejorando sus oportunidades de ascenso,
como ella misma había hecho.
Continuó
trabajando en la NASA hasta su jubilación en 1985.
Katherine Johnson
(26 de agosto de 1918 (98 años)) es una física estadounidense, científica
espacial, y matemática que contribuyó a la aeronáutica
de los Estados Unidos y sus programas espaciales con la aplicación temprana de
las computadoras
electrónicas digitales en la NASA. Conocida por su precisión en la navegación astronómica,
calculó la trayectoria para el Proyecto
Mercury y el vuelo del Apolo 11 a la Luna en 1969.
Coleman
Goble Johnson fue inicialmente asignada a la sección West Area Computers que
era supervisada por la matemática Dorothy
Vaughan, y luego reasignada al área de Guía y Control de la División de
Investigación de Vuelo de Langley.
Más
tarde se trasladó al área de Controles de Naves Espaciales (Spacecraft
Controls Branch). Coleman Goble Johnson calculó la trayectoria del vuelo
espacial de Alan Shepard, el primer estadounidense en viajar al
espacio, en 1959.
También
calculó la ventana de lanzamiento del Proyecto
Mercury de 1961.
En
1962, cuando la NASA comenzó a utilizar computadoras
electrónicas para calcular la órbita de John Glenn
alerededor de la Tierra,
fue convocada para verificar los resultados de la computadora.
Más
tarde Johnson trabajó directamente con computadoras digitales. Su capacidad y
reputación por la exactitud de sus cálculos ayudaron a establecer confianza con
la nueva tecnología.
Calculó
la trayectoria de vuelo del Apolo 11 hacia la Luna. Durante el alunizaje,
Johnson se encontraba reunida en las montañas Pocono junto con un
pequeño grupo frente a una pequeña pantalla de televisor observando los
primeros pasos en la Luna.
En
1970, Katherine trabajó en la misión del Apolo 13.
Una vez que la misión fue abortada, el trabajo de Johnson en implementar
procedimientos y cartas de navegación de respaldo ayudó a que la tripulación
pudiera regresar a salvo a la Tierra cuatro días más tarde.
"Figuras Ocultas" adapta a la gran pantalla la novela de Margot Lee Shetterly titulada Hidden Figures: The Story of the African-American Women Who Helped Win the Space Race.