Luchas colectivas.La rebelión contra el orden patriarcal ha adquirido a lo largo del tiempo muchas formas. Sin duda, es importante la conciencia individual de la opresión sexista para que se tomen iniciativas personales liberadoras, pero es en el terreno de la participación colectiva donde se dirimen con mayor impacto los conflictos sociales y donde la visibilidad pública puede dar mayores frutos. Así ha sucedido con los esfuerzos llevados a cabo por distintas asociaciones de activistas a lo largo de la historia del feminismo. En España fue sobre todo a partir de los setenta cuando se dieron pasos para salir de la carcasa machista. La muerte del dictador alentó la explosión de manifestaciones en las que se pedía la despenalización del adulterio, se llamaba la atención sobre el maltrato, se protestaba contra las violaciones. La organización de distintas jornadas y asambleas de la mujer (Barcelona, Granada, Madrid, Valencia…) alimentó la conciencia feminista pese a que no solo la derecha se oponía a muchas reivindicaciones igualitarias, sino también algunos sectores de la izquierda. En los años noventa irrumpe la visibilidad lesbiana.
Fuente: Genealogías feministas en el arte español: 1960-2010.Documentación:Un proyecto ideado por Patricia Mayayo y Juan Vicente Aliaga
Imagen: Pilar Aymerich