lunes, 22 de febrero de 2016

Giulietta Masina.



Giulietta Masina (San Giorgio di Piano, 22 de febrero de 1921 – Roma, 23 de marzo de 1994). Actriz italiana


Giulietta Masina ha interpretado como ninguna actriz las diferentes situaciones de maltrato hacia las mujeres: violencia de género en  La strada, la situación de las mujeres prostitutas en Las noches de Cabiria, la infidelidad  en la pareja en Giulietta de los Espíritus, el paso de la vejez en Ginger y Fred…




Se licenció en Filosofía y Letras por la Universidad de La Sapienza. Durante su paso por la universidad, cultivó su pasión por la interpretación y en el curso 1941–1942 participó en numerosos espectáculos de danza, música y teatro universitario en el Stadium Urbis, que luego se convertiría en el Teatro Ateneo de Roma.

En 1943 entró a formar parte de la Compañía de Teatro Cómico Musical donde actuaría como bailarina, cantante y actriz en diferentes operetas y obras cómicas.

En esas fechas, también comienza a trabajar como actriz de radio, junto a Nella Maria Bonora y Franco Becci, voces muy populares en la época. Comienza a ser conocida por el éxito del serial radiofónico Terziglio que contaba las aventuras de Cico y Pallina, que interpretaba junto al locutor Angelo Zanobini. Estaba escrito por Federico Fellini, por entonces un versátil joven, redactor de la revista satírica Marc'Aurelio.




Giulietta y Federico se casan en 1943, comenzando así una intensa relación afectiva y artística, que sería una de las más relevantes de la historia del cine italiano.

Después del fin de la Segunda Guerra Mundial, retoma el teatro universitario con la obra Angélica, escrita y dirigida por Leo Ferrero y coprotagonizada por Marcello Mastroianni.

La obra Gli innamorati sería su última incursión en el teatro en 1951.

Su primera incursión en el cine se produjo en 1946 como extra en la película Camarada (Paisà) de Roberto Rossellini, pero su verdadero primer trabajo fue en 1947 en la película Sin piedad (Senza pietà), dirigida por Alberto Lattuada e interpretada junto a Carla del Poggio. Este papel, de chica de buen corazón y aspecto pizpireto, se repetirá en esta primera etapa en películas dirigidas por Carlo Lizzani, Giuseppe Amato o Renato Castellani. 



Pero es de la mano de Fellini cuando alcanza la popularidad mundial con su mítico personaje de Gelsomina en la película La strada (1954), junto a Anthony Quinn y Richard Basehart. La película trata de una joven que trabaja para un artista ambulante llamado Zampanò (Anthony Quinn). La joven muere, y la madre toma a Gelsomina (Giulietta Masina), también hija suya, y la vende al artista. 





Pese al carácter violento de Zampanò, la muchacha se siente atraída por el estilo de vida en la calle (la strada), sobre todo cuando su dueño la incluye como parte del espectáculo. Aunque varios de los personajes que se encuentra por el camino le ofrecen que se una a ellos, Gelsomina demostrará su lealtad a Zampanò hasta los límites.






En 1957, Giulietta Masina interpretó el que es, probablemente, el papel más relevante de su carrera en Las noches de Cabiria dirigida también  por Fellini. Giulietta Masina, es Cabiria Ceccarelli, prostituta de la zona de Ostia, en Roma. 






El film cuenta la historia de Cabiria, una prostituta que busca el amor pero lo que en realidad encuentra son desengaños amorosos. Su bondad y una cierta ingenuidad la convierten en víctima de sucesivos vividores que se aprovechan de ella, le roban y golpean. A pesar de ello, Cabiria se encuentra con un hombre que le promete un futuro respetable pero, a ello, le siguen una serie de episodios humillantes donde se pone a prueba la bondad de Cabiria.








En 1958 trabaja junto a Alberto Sordi en la película Fortunella del director Eduardo De Filippo.

Fellini contará también con su esposa en su primer largometraje en color, Giulietta de los espíritus  (1965), una historia de fuerte carga surrealista sobre la infidelidad en la pareja.


En 1985, volverá a actuar para Fellini en la melancólica historia de Ginger y Fred donde junto a Marcello Mastroianni interpretarán a una antigua pareja de baile que imitaban a Fred Astaire y Ginger Rogers, muy populares durante la guerra y que se reúnen al cabo de muchos años invitados por un grandilocuente show televisivo, paradigma del consumismo y del sentimentalismo fácil.



Premios:

Entre los premios más importantes de su trayectoria se puede destacar los cuatro Lazos de Plata (Nastro d'Argento) del Sindicato de periodistas cinematográficos italianos, como actriz principal en Las noches de Cabiria (1958) y Ginger y Fred (1986) y como actriz secundaria en Sin piedad (1948) y Luces de variedades (Luci del varietà) (1950).

Además le fue concedido un David de Donatello especial en el 30º aniversario de los premios en 1986 y fue candidata en dos ocasiones a los Premios BAFTA británicos como mejor actriz extranjera en 1954 y 1957.

En los festivales de cine, Giuletta Masina obtuvo el reconocimiento como mejor actriz por su papel en Las noches de Cabiria en 1957 en Cannes y en San Sebastián.

Giulietta Masina trabajó también en radio y televisión. De 1966 a 1969 fue, con gran éxito, presentadora de un programa radiofónico titulado Cartas a Giuletta Masina, en el que los radioyentes escribían a la actriz. Estas cartas fueron posteriormente recopiladas en un libro.

También trabajó en televisión fundamentalmente en los 70, en dos producciones de gran éxito: Eleonora (1973) dirigida por Silverio Blasi y Camilla (1976) dirigida por Sandro Bolchi, adaptación de la novela Un inverno freddissimo de Fausta Cialente.