“Estamos profundamente horrorizadas por la destrucción sin precedente de la Madre Tierra, por la contaminación del aire, agua y suelo; por las atrocidades de la guerra, el azote global de la pobreza, la amenaza de las bombas nucleares, el derroche de la prevaleciente cultura del materialismo, las epidemias que amenazan la salud de los seres de la Tierra, la explotación de las medicinas indígenas, y la destrucción de nuestros modos de vida. Por eso el “Consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas" nos hemos unido como una sola mujer en una alianza de oración, educación y sanación para la Madre Tierra.”Las integrantes del Consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas son: Aama Bombo Tamang de Nepal .Margaret Behan Arapaho/Cheyenne. Montana, EEUU.Rita Pitka Blumenstein Yup'ik. Círculo Artico.EEUU .Julieta Casimiro Mazatec. Huautla de Jimenez, Mexico.Maria Alice Campos Freire de la Amazonia, Brasil. Flordemayo Mayan. Highlands of Central America/ Nuevo Mexico, EEUU.Tsering Dolma Gyaltong,Tibet.Beatrice Long Visitor Holy Dance Oglala Lakota. Black Hills, South Dakota, EEUU.Rita Long Visitor Holy Dance Oglala Lakota. Black Hills, South Dakota, , EEUU .Agnes Baker Pilgrim Takelma Siletz. Grants Pass, Oregon, EEUU .Mona Polacca Hopi/Havasupai/Tewa. Arizona , EEUU.Bernadette Rebienot Omyene. Gabon, Africa y Clara Shinobu Iura de la Amazonía, Brasil. Trece Abuelas que recorren el mundo desde la selva Amazónica, el Círculo Polar Ártico de Norte América, el gran bosque del noroeste americano, desde las vastas planicies de Norte América, los altiplanos de América Central, las Blacks Hills del sur de Dakota, las montañas de Oaxaca, el desierto del sudoeste de América, las montañas del Tibet y desde la selva de África Central, para volver a conectarnos con la naturaleza y lograr la armonía interior que hace tiempo perdimos en la cultura occidental.
Consejos de las 13 Abuelas
Respetar y cuidar a la madre
tierra para vivir sin romper el equilibrio del planeta. Sentimiento de unidad
con la tierra y el cosmos: Padre Cielo, Madre Tierra.
Conectar con la fuerza más
pura del ser humano que es el amor incondicional. “Amaros los unos a los otros”
– Sistema basado en la reciprocidad
Honrar y confiar en el mundo
de los espíritus de los ancestros. Recordar a los antepasados con amor. Sanarse
a si mismo para sanar a nuestros ancestros y no repetir sus mismos errores a
través de generaciones.
Volver a nuestro Espíritu
Interno y al Espíritu de todas las cosas para encontrar la verdad dentro de
nosotras. Tener el valor de mirar dentro de una misma y fuera de una misma.
Trabajar la ira sin volcarla
en los demás.
Escuchar el silencio, las
respuestas siempre acaban llegando.
Liberarse de las adicciones y
de los juicios sociales eligiendo ser una persona productiva.
Respetar a los ancianos/as, a
la familia, a las niñas/os, a todo ser vivo.
Enseñar a los niños a
reverenciar la vida y ser buenas personas.
Respetar nuestro cuerpo y
nuestra sexualidad como algo sagrado y fuente de vida.
Tomar conciencia de que la
única persona que puede darnos todo lo que necesitamos en una relación somos
nosotras mismas.
Aceptarnos a nosotras y a
los/as demás tal y como somos.
Creer en los poderes
sanadores de las plantas.
Integrar la medicina
tradicional y la indígena para sanar también el alma y no solo parte del
cuerpo.
Acabar con la insatisfacción
de una vida vacía y sin sentido.
Recordar que la
competitividad insana destruye al individuo, así como la violencia y la
avaricia.
Perdonar para preservar la
salud y vivir en paz. Aceptar y perdonar el pasado para vivir el presente y
mejorar el futuro.
Obtener fuerza física,
mental, emocional y espiritual para cambiar y vivir en paz y en armonía.