Las Moiras. En la mitología
griega eran divinidades femeninas que controlaban el hilo de la vida de cada
mortal desde el nacimiento hasta la muerte. Eran las personificaciones del
destino. Eran tan poderosas que La Moiras
impedían a cualquier dios acudir en socorro de un héroe determinado en
el campo de batalla cuando ha llegado su “hora”. Se las representaba comúnmente como a tres
mujeres hieráticas, de aspecto severo y vestidas con túnicas. En otras
ocasiones se les atribuye la apariencia de tres viejas hilanderas, o de tres
melancólicas damas (una doncella, una matrona y una anciana, respectivamente).
Shakespeare se inspiró en este mito para crear las tres brujas que aparecen en
Macbeth, cuya intervención es determinante en el destino del protagonista. Sus
nombres eran: Cloto, (Κλωθώ, ‘hilandera’) hilaba la hebra de vida con una rueca
y un huso. Se la representa portando una rueca; Láquesis, (Λάχεσις, ‘la que
echa a suertes’) medía con su vara la longitud del hilo de la vida. Se la
representa con una vara, una pluma o un
globo del mundo; y Átropos, (Ἄτροπος, ‘inexorable’ o ‘inevitable) era quien
cortaba el hilo de la vida. Elegía la forma en que moría cada persona,
seccionando la hebra con sus tijeras
cuando llegaba la hora.Se la representa con unas tijeras o una balanza. En la
tradición griega, se aparecían tres noches después del alumbramiento de un niño
para determinar el curso de su vida. En origen quizá podrían haber sido diosas
de los nacimientos, adquiriendo más tarde su papel como señoras del destino. Las
Moiras inspiraban gran temor y reverencia, aunque podían ser adoradas como
otras diosas: las novias atenienses les ofrecían mechones de pelo y las mujeres
juraban por ellas
Sus equivalentes en la
mitología romana eran las Parcas o Fata. Los nombres de las tres Parcas eran: Nona,
que hilaba el hilo de la vida desde su rueca hasta su huso. Su equivalente
griega era Cloto. Décima, que medía el hilo de la vida con su vara. Su
equivalente griega era Láquesis. Morta, que cortaba el hilo de la vida,
eligiendo la forma en que la persona moría. Su equivalente griega era Átropos. Como
las Moiras, son también tres hermanas: una preside el nacimiento; otra, el
matrimonio, y la tercera, la muerte.En el Foro, las tres Parcas estaban
representadas por tres estatuas, llamadas corrientemente las Tres Hadas (tria
Fata, los tres “destinos”).
Las Nornas. Espíritus
femeninos de la mitología nórdica. Tres de ellas son las principales, conocidas
por los nombres de Urðr (o Urd, "lo que ha ocurrido", el destino),
Verðandi (o Verdandi, "lo que ocurre ahora") y Skuld ("lo que
debería suceder, o es necesario que ocurra"). Las Nornas viven bajo las
raíces del fresno Yggdrasil, el árbol del mundo en el centro del cosmos, donde
tejen los tapices de los destinos y riegan el fresno con las aguas y la arcilla
provenientes del pozo de Urd para que éste no pierda su verdor ni se pudra. La
vida de cada persona es un hilo en su telar, y la longitud de cada cuerda es la
duración de la vida de dicha persona.